Empezamos cociendo las patatas enteras y sin pelar en abundante agua con sal. Cuando ya estén tiernas, las escurrimos y las dejamos atemperar.
Cortamos las patatas a láminas finas y las incorporamos en una bandeja honda.
Pelamos y cortamos finamente las cebollas, y las añadimos a el recipiente de las patatas. También le añadimos el vino blanco.
Cortamos el beicon en tiras y las doramos en una sartén. Después las incorporamos al mismo recipiente del resto.
Retiramos la corteza del queso brie o reblochon y lo cortamos a tiras finas.
Escogemos un molde de horno y lo engrasamos con mantequilla. Seguidamente montamos las tartiflette, alternando capas de la mezcla de patata que hemos preparado, sal y pimienta, brisura de trufa negra, queso y la nata líquida.
Lo cocemos en el horno, precalentado a 180ª con calor arriba y abajo y lo dejamos durante 20 o 30 minutos vigilando que la superficie no se dore demasiado.
Finalmente, emplatamos y rallamos trufa negra por encima.
¡Buen provecho!